La cifra de muertos por las explosiones de hace dos semanas en un almacén de productos químicos en la ciudad china de Tianjin, en el norte de país, se elevó hoy a 139, mientras 34 personas permanecen desaparecidas y 527 siguen hospitalizadas.
El balance de víctimas mortales se incrementó de 135 a 139 tras el hallazgo de cuatro cuerpos de los 38 desaparecidos, informaron este miércoles autoridades de rescate de China.
Todos los fallecidos han sido identificados, incluidos 84 bomberos y ocho policías, así como otras 47 personas, además 272 heridos ya fueron dados de alta de los hospitales, aunque quedan 527 hospitalizados, 34 de ellos graves.
El 12 de agosto pasado se registró un incendio en una terminal de contenedores del puerto de Tianjin, seguido de una serie de explosiones, entre ellas dos de tal magnitud que fueron detectadas por los sismógrafos como si se tratara de sismos.
El almacén donde ocurrieron las detonaciones contenía unas tres mil toneladas de productos químicos peligrosos, incluyendo unas 700 toneladas de cianuro de sodio, un compuesto altamente tóxico que puede ser mortal y que explota en contacto con el agua.
Tras las explosiones en Tianjin han salido a la luz una serie de irregularidades que habría cometido la empresa Ruihai International Logistics, responsable del almacén donde ocurrió la tragedia.
Autoridades chinas investigan las denuncias de que la empresa Ruihai trabajó con químicos peligrosos durante un periodo de tiempo sin tener licencia para ello, informó la agencia china de noticias Xinhua.
A dos semanas de las explosiones, el director de la Administración Estatal de Seguridad Laboral de China, Yang Dongliang, fue destituido de su puesto por su supuesta implicación en actividades corruptas, confirmó este miércoles el Partido Comunista.
Las autoridades chinas no han vinculado a Yang con las explosiones de Tianjin, pero su pasado como vicealcalde de esta ciudad y su responsabilidad en materia de seguridad laboral lo han situado en una posición complicada.