La Organización Mundial de la Salud (OMS), ha lanzado una alerta urgente ante la creciente amenaza de un brote de ántrax en Zambia, iniciado el 1 de noviembre. La situación ha despertado preocupación mundial debido al riesgo potencial de rápida expansión a países vecinos.
Según los informes de la OMS, hasta el 20 de noviembre, se habían registrado cuatro muertes y aproximadamente 684 casos sospechosos de ántrax en Zambia.
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Lo que hace que esta situación sea aún más crítica, es la posibilidad de que la enfermedad se propague a otras naciones africanas, dada la movilidad de la población y las condiciones propicias para la propagación.
La OMS no solo ha identificado a Zambia como una zona de alto riesgo, sino que también ha puesto bajo sospecha a cuatro países adicionales debido a posibles casos de ántrax. Este llamado de alerta lleva consigo la urgencia de establecer protocolos efectivos para prevenir la diseminación del ántrax en la región.
La naturaleza bacteriana del ántrax presenta un desafío sin precedentes. Las esporas de la bacteria, Bacillus anthracis, pueden depositarse en alimentos o animales, lo que eleva la posibilidad de contagio al consumirlos. Además, existe el riesgo adicional de contraer la enfermedad mediante la respiración en ambientes contaminados.
Expertos médicos han subrayado la gravedad de este brote, destacando que el ántrax puede causar lesiones en la piel, síntomas gripales, problemas gastrointestinales e incluso insuficiencia respiratoria. El tratamiento, que implica el uso de antibióticos específicos, se vuelve crucial para combatir las esporas dentro del cuerpo humano.
/LT
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