De poco sirve restringir los horarios de bares y restaurantes cuando al ser espacios cerrados y que reúnen a muchas personas, se mantienen como lugares de alto riesgo para contraer la covid-19, aseguró el infectólogo Juan Luis Mosqueda, quien además advirtió que Guanajuato está más cerca de pasar a rojo que a amarillo en el semáforo de reactivación.
En entrevista, el director del Hospital Regional de Alta Especialidad del Bajío consideró que los establecimientos como bares, restaurantes y gimnasios deberían estar cerrados, para así ayudar a disminuir el ritmo de contagio alcanzado en las últimas semanas.
Sin embargo, lamentó que ciudadanos y autoridades parece que no han entendido cuáles son los principales mecanismos para inhibir la transmisión de la covid-19, como lo son el uso de cubrebocas, la sana distancia y sobre todo, evitar los espacios poco ventilados y con aglomeraciones.
“Digo que no se ha entendido porque me di cuenta que recién se tomó la decisión aquí en León, por ejemplo, que en las plazas comerciales no puede haber niños, pero si entran al restaurante de una plaza sí, cuando lo más seguro para un niño es andar caminando en la plaza, en un lugar abierto, y es más riesgoso”, dijo.
Juan Luis Mosqueda señaló que tampoco es adecuado que mientras se permite el funcionamiento de gimnasios, lugares de alto riesgo para la propagación del coronavirus, se restrinja la actividad en espacios abiertos como el Parque Metropolitano.
Por ello, apuntó que es necesario aprender de lo que ha sucedido en muchos lugares de Europa en donde la apertura de bares y restaurantes propiciaron que hubiera rebrotes de la covid, y reconoció que en estos momentos, Guanajuato está más cerca de retroceder a color rojo, que avanzar a color amarillo.