Un empleado de la dirección de Servicios Generales del Congreso del Estado renunció a su cargo luego de que sacó un vehículo oficial sin permiso y horas más tarde, fue remitido a los separos en Guanajuato capital por conducir en estado de ebriedad.
El empleado de nivel salarial 3 cumplió las horas de arresto, mientras otro trabajador del Poder Legislativo hizo las gestiones necesarias para sacar el vehículo del corralón y pagar 8 mil pesos, pero el responsable incurrió en abuso de confianza y aceptó presentar su renuncia, dijo Omar Mares, director Administrativo del Poder Legislativo.
Los hechos ocurrieron el viernes pasado, cuando Alejandro Esaú Landeros burló los controles de seguridad después de cubrir una comisión, y se llevó un Lancer Mitsubishi.
En el Congreso se enteraron hasta las 3 o 4 de la tarde del sábado que el vehículo no se encontraba en el edificio, y que el empleado mencionado lo había sacado por las cámaras del Congreso.
El director administrativo dijo que si bien hay un registro digital del uso de vehículos del Poder Legislativo, se necesita un reforzamiento de las medidas de control pues de no haberse dado la falta administrativa del empleado, el incidente habría pasado inadvertido.
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