La Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) realizó una supervisión en la Refinería Antonio M. Amor en Salamanca como parte del Programa Nacional para la Atención de Prioridades de Seguridad Industrial y Operativa, y tras la explosión que se registró hace unos días.
Carlos de Regules, director ejecutivo de la Agencia, informó que el objetivo del Programa Nacional para la Atención de Prioridades de Seguridad Industrial y Operativa de las seis refinerías del país (Cadereyta, Madero, Minatitlán, Salamanca, Salina Cruz y Tula) es supervisar el cumplimiento de los estándares de seguridad industrial y seguridad operativa para garantizar la integridad de las personas, las instalaciones y la protección del medio ambiente.
Detalló que el programa inició en la Refinería de Salamanca para verificar la accidentabilidad, cumplimiento a recomendaciones derivadas del análisis de riesgo de procesos e investigación de causa raíz de eventos, factores de cumplimiento al programa de inspecciones y pruebas y mantenimientos en equipos críticos, como por ejemplo, el censo de equipo estático, dinámico, eléctrico, instrumentación y control; plan y programas de inspecciones y pruebas de equipo estático, dinámico, eléctrico, instrumentación y control, y revisión de capacitación y certificación del personal que ejecuta las inspecciones.
Añadió que el periodo de inspección comprenderá de marzo a agosto del 2017, y es un ejercicio en el cual los regulados, a partir de la autodeterminación y autodeclaración, garantizan que cuentan con las condiciones apropiadas en que desarrollan sus actividades y donde demuestran a la autoridad federal que llevan a cabo acciones preventivas para dar cumplimiento a la legislación aplicable al sector de los hidrocarburos
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