A partir del primero de enero de 2017 la Secretaría de Hacienda y Crédito Público endurecerá los criterios para la comprobación de las asignaciones y apoyos a los legisladores federales y locales para garantizar que los recursos sean utilizados para lo que fueron entregados.
De esta forma los senadores, diputados federales y diputados locales estarán obligados a comprobar mediante facturas electrónicas la forma en cómo utilizan las asignaciones que reciben, incluso las otorgadas mediante los grupos parlamentarios.
El oficio enviado por el Sistema de Administración Tributaria (SAT) enlista asignaciones por concepto de atención ciudadana, asistencia legislativa o parlamentaria, gastos de gestión parlamentaria, gastos de viajes, apoyo de traslados, entre otros.
Por ejemplo, el salario mensual de un diputado federal está integrado por su dieta (73 mil 817.10 pesos) más apoyos económicos para asistencia legislativa (45 mil 786 pesos) y atención ciudadana (28 mil 772 pesos).
En estos dos últimos los legisladores no tenían que comprobar los gastos. Pero con las nuevas disposiciones del SAT deberán comprobarlos mediante facturas, de lo contrario deberán pagar el ISR correspondiente.
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