La Dirección General de Educación prevé destinar 1 millón de pesos para la compra de monitores de dióxido de carbono que sirvan para verificar si los salones en las escuelas están debidamente ventilados, o no.
En la Comisión de Desarrollo Social y Educación, el director de la dependencia, Jonathan González Muñoz, indicó que con dicho monto de adquirirán entre 750 y 800 de estos dispositivos, con lo cual se alcanzaría a repartir uno en cada plantel educativo.
Añadió que en aquellos casos donde se tenga una matrícula mayor, que ronde entre los 600 y 700 alumnos, se otorgarían dos monitores, los cuales permitirán constatar periódicamente la concentración de dióxido de carbono en cada aula.
“Platicando con el doctor Juan Martín Álvarez (director de Salud municipal), me decía que no veía la necesidad de tener uno por salón necesariamente, sino que podríamos optimizar e ir llevando una bitácora en cada uno de los salones para que esto se pueda ir previendo y ver en dónde sí se está ventilando bien, en dónde no tanto e ir haciendo estrategia”, dijo.
El Director de Educación también informó a los regidores de la comisión que solicitará 8 millones 605 mil pesos para la rehabilitación de 10 escuelas que fueron vandalizadas, y que por ello, no pudieron retomarse las clases presenciales en esos planteles.
Con esta cifra, se alcanzarán a reparar las 247 escuelas vandalizadas que inicialmente fueron proyectadas, y para lo cual se habrá destinado una inversión de casi 59 millones de pesos.