Apenas pasado jueves inició la Fiscalía General la investigación del asesinato de una joven con problemas de adicciones de la colonia Refugio de San José, cuyo cuerpo fue localizado en el camino a Los Ramírez; y dos días después abrió otra investigación por el homicidio de un adicto en la propia colonia, aunque no ha reconocido una relación entre ambos casos en lo que el consumo y la disponibilidad de drogas sería una línea de investigación.
Los casos son el de hallazgo del cuerpo de una joven de 23 años, quien fue luego identificada como vecina de la colonia Refugio de San José, y descrita por las autoridades como una persona con problemas de consumo de drogas.
Adriana, como la identificó la Fiscalía Regional A, había salido de su casa el miércoles 6 de marzo y su cadáver fue localizado en un paraje del camino a Los Ramírez al día siguiente en el transcurso de la mañana.
Había sido ahorcada, informó el Ministerio Público del fuero común una vez que conoció el resultado de necropsia y abrió una investigación por homicidio, pero a la fecha no ha dado a conocer resultados sobre quiénes le dieron muerte y por qué.
El uso de drogas es una línea de investigación que siguen las autoridades ministeriales.
En el segundo caso, el homicidio a balazos planeado y consumado en contra de un hombre en la casa de la víctima, en la calle San José de Buenaventura, también surgió el dato de que era consumidor de droga, una vez que hicieron la identificación del cadáver sus familiares.
La mecánica de hechos, confirmada por el Ministerio Público, señala que Román, de 52 años, abrió la puerta cuando lo asesinaron.
Hasta este lunes, a pregunta expresa, la Fiscalía Regional A sostuvo que no encuentra una relación manifiesta entre la muerte de la joven asesinada entre el miércoles y el jueves, y el asesinato de Román, consumado el sábado, aunque tampoco lo descartó.
Hasta este lunes no daba a conocer resultados de las indagaciones en ninguno de esos casos.
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