León.- La petición de incrementar el transporte público 4 pesos es “muy onerosa”, pero se debe garantizar que siga siendo negocio para que no quiebren los concesionarios, aseguró el presidente del Consejo Coordinador Empresarial de León, Luis Gerardo González García.
En entrevista, consideró que los aumentos tarifarios han sido “muy reprimidos” en la ciudad, pues desde mediados del 2019 los ingresos de los transportistas se han mantenido en las mismas condiciones, a pesar de que el precio de sus insumos se han elevado en ese periodo.
Afirmó que dicha situación ha generado una gran brecha entre los egresos en la prestación del servicio, y el dinero que se genera.
Por ello, indicó que si bien subir el pasaje 4 pesos sería un golpe muy duro para muchos leoneses, sí se debe analizar que el transporte siga siendo un negocio rentable.
“A los colaboradores de nosotros y a toda la sociedad, debemos de blindarlos, pero no a costa de quebrar una empresa que da un servicio de los mejores que tenemos en el país y a lo mejor de clase mundial. Si no le pagamos los costos que requiere para operar, acabará dejando de prestar el servicio o será de muy mala calidad”, dijo.
Además, sostuvo que el Sistema Integrado de Transporte de León no solamente es uno de los mejores a nivel nacional, sino también en Latinoamérica, aunque aclaró que eso no significa que tenga muchas áreas de mejora.
Mayra Legaspi pide alternativas
En tanto, la directora del Observatorio Ciudadano de León, Mayra Legaspi, sostuvo que deben buscarse alternativas para evitar transferir a los leoneses todo el impacto del incremento que han tenido los insumos de los transportistas.
“Me parece que pegarle al bolsillo de la ciudadanía sería una situación compleja, no todos nos hemos recuperado de la pandemia, entonces la posición del Observatorio necesitaríamos un análisis más profundo y buscar alternativas que no le peguen al ciudadano en este pago extra para la movilidad”, dijo.
Además, Mayra Legaspi subrayó que no se debe perder de vista que el Sistema Integrado de Transporte es, en esencia, un servicio público, por lo que debe cuidarse siempre que no impacte de forma considerable las finanzas de la ciudadanía.
Agregó que, a pesar de que sí ha habido mejoras en la prestación del servicio, el principal pendiente sigue siendo el reducir el tiempo de espera para los usuarios.
/r/e
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