El gran reto de la Secretaría de Movilidad Humana y Migración será que sus políticas públicas y acciones surjan de la propia población objetivo, es decir, de los propios migrantes internos y externos, y no de manera vertical, como generalmente ocurre.
Así lo aseguró Giovanna Battaglia Velázquez, directora del Centro de Desarrollo Indígena Loyola, quien destacó que es un avance importante el hecho de que al fin se visibilice el fenómeno de la movilidad humana, no solo de los guanajuatenses que parten a Estados Unidos, sino de los migrantes connacionales que llegan a Guanajuato, principalmente a trabajar en el sector agrícola y de la construcción.
Creo que es un buen avance visibilizar una problemática que tiene Guanajuato como estado receptor de población, no solamente indígena pero sí tiene rostro indígena, o sea, Guanajuato, con el crecimiento económico que ha tenido, ha generado demanda de mano de obra que ha sido cubierta con los estados más pobres del país, Guerrero en los campos agrícolas, Chiapas en la construcción, el estado de Puebla; entonces el reto aquí será integrar la visión y participación de los propios sujetos, ese es el gran reto”, declaró.
Afirmó que la migración interna interestatal es un fenómeno que ha sido descuidado por el Gobierno estatal, y solo es visibilizado cuando estos migrantes sufren violencia o son reveladas las condiciones inhumanas en las que viven y trabajan en la entidad.
Por lo anterior, Giovanna Battaglia sostuvo que una de las primeras acciones que debería emprender la nueva secretaría que encabezará Juan Hernández, es elaborar un plan de infraestructura con la finalidad de generar condiciones dignas para las familias de jornaleros indígenas que llegan a la entidad, y que durante años lo han hecho a pesar de vivir en condiciones de hacinamiento y de la carencia de servicios de salud.
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